El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, fue destituido por el Congreso este viernes tras un juicio político público que se llevó a cabo en el Senado local por “mal desempeño de sus funciones”.
En total, 39 de los 43 senadores presentes entendieron que el mandatario es culpable de las acusaciones y quedó automáticamente destituido, ya que alcanzaron los dos tercios (30 de 45 sin importar las ausencias) que exige la Constitución del país.
El actual vicepresidente Federico Franco asumirá la presidencia en una ceremonia que se realizará en la próxima media hora.
“Estamos ante un golpe de Estado en el Paraguay. Como alcalde le solicito a nuestro gobierno actuar en favor de la democracia paraguaya”, pide el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, en su cuenta de twitter.
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