Las calles de las principales ciudades del país se llenaron este jueves con miles de manifestantes que conmemoraron el Día Internacional del Trabajo y, al mismo tiempo, expresaron su respaldo a las reformas laborales impulsadas por el presidente Gustavo Petro y su llamado a una consulta popular para defender los derechos de los trabajadores.
En Bogotá, la jornada tuvo como epicentro la Plaza de Bolívar, donde confluyeron diversas movilizaciones provenientes de distintos puntos de la ciudad. Sindicatos, organizaciones sociales y ciudadanos respondieron a la convocatoria del Gobierno nacional y de las centrales obreras. La minga indígena también se sumó desde tempranas horas, partiendo desde la Universidad Nacional hacia el centro de la capital.
El presidente Gustavo Petro, acompañado de la emblemática espada de Simón Bolívar, caminó por la carrera octava hasta llegar a la plaza, donde pronunció un discurso ante miles de asistentes. Criticó a los congresistas que, según dijo, frenaron la reforma laboral, y lanzó un llamado contundente a los ciudadanos: “Ningún parlamentario que vote en contra de la consulta popular debe ser reelegido. No los volverán a elegir”, afirmó. Petro reiteró que no busca una reelección y pidió que el poder sea entregado directamente al pueblo a través de las urnas.
A nivel nacional, las manifestaciones se replicaron en Cali, Medellín, Barranquilla, Bucaramanga, Pasto, Popayán y otras ciudades capitales. En varias de estas marchas, los participantes alzaron su voz a favor de la consulta popular que busca restablecer derechos laborales, mientras que en otros lugares también se registraron protestas y expresiones de inconformidad social.
En algunas zonas de Bogotá, como la carrera séptima con calle 46, se presentaron actos de alteración del orden cuando un grupo de encapuchados quemó llantas, lo que obligó a las autoridades a cerrar temporalmente esa vía. Sin embargo, en la mayoría de ciudades las movilizaciones se desarrollaron de manera pacífica.
El ministro del Interior, Armando Benedetti, instó a los manifestantes a marchar con tranquilidad y alegría, destacando que la jornada era una celebración de los derechos de la clase trabajadora. La exministra Susana Muhammad también se unió a las marchas y enfatizó que, si el Congreso no es capaz de legislar a favor del pueblo, este debe tomar las decisiones directamente mediante la consulta popular.
Para garantizar la seguridad de los participantes, el Ministerio de Defensa desplegó cerca de 28.400 policías y 1.300 gestores de convivencia en todo el territorio nacional. Según el reporte oficial, más de 219 movilizaciones se desarrollaron a lo largo del día en distintas regiones del país.
En ciudades como Armenia, las movilizaciones arrancaron desde el Banco de la República a las 9:00 de la mañana, reuniendo a sindicatos, trabajadores y ciudadanos que marcharon en solidaridad con las causas laborales y en respaldo a las propuestas del Gobierno.
El primero de mayo de 2025 quedará registrado como una jornada en la que los colombianos no solo conmemoraron el valor del trabajo, sino que también elevaron su voz en defensa de los derechos laborales y en apoyo a la posibilidad de que sea el pueblo quien defina su futuro a través de una consulta popular.







