El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ratificó el martes la ley que modifica el sistema de pensiones del país, uno de los proyectos más significativos de su administración. La firma se llevó a cabo en un evento público en la plaza de Bolívar en Bogotá, donde Petro subrayó los beneficios que traerá la reforma.
Aprobada en junio por la Cámara de Representantes y semanas antes por el Senado, la reforma está a la espera de la promulgación presidencial para entrar en vigor.
La reforma introduce un sistema de pensiones estructurado en tres componentes: solidario, semicontributivo y contributivo. Además, establece que todos los trabajadores deben contribuir a un fondo público o privado, dependiendo de su nivel de ingresos.
El Gobierno asegura que estas modificaciones permitirán que un mayor número de colombianos obtenga una “pensión digna”.
Varios políticos de oposición argumentan que, aunque es necesario expandir la cobertura de pensiones, la reforma no es financieramente viable y podría causar problemas a las finanzas públicas de Colombia. El Gobierno, por su parte, niega estas afirmaciones.