Hace más de 20 años una empresa familiar liderada por Leonardo Castaño fabrica las más bellas artesanías que son orgullo para el Quindío.
En los inicios, la materia prima para elaborar sus productos fueron los calabazos y los totumos, con ellos, representaron los personajes típicos como la chapolera y el recolector de café, figuras que las llevaron a diferentes lugares del país en variadas exposiciones artesanales. Su colorido y fina elaboración se destacó en sus artesanías.
En su exploración artística y debido a su creatividad innata este joven quindiano junto con su madre, tías y primos han gestado una empresa familiar que hoy es conocida en Colombia y en países como Méjico, EE.UU., España, entre otros.
Allí en el Taller Artesanal ubicado a unas pocas cuadras de la Plaza de Bolívar de Armenia se respira arte. En el recorrido encontramos una gran variedad de artesanías en totumo, calabazos y otros materiales típicos de la región como guasca, iraca y madera. Es sorprendente encontrar en poco espacio tanta variedad y creatividad: pesebres, mesas de juegos, cuadros, lámparas, percheros, porta- materas, jarrones.
Hoy, Leonardo se ha convertido en un experto diseñador y decorador de interiores. Sus productos, sus ideas, están en diferentes haciendas cafeteras y establecimientos comerciales de la región.
El esfuerzo de este quindiano unido al de su familia también ha permitido que muchos extranjeros lleven un pedacito de este terruño para sus hogares.
No ha sido fácil, sobre todo porque en los últimos años han llegado del exterior productos que pretenden competir con los suyos y naturalmente las ventas han decaído.
Pero no podemos discutir: sus productos exclusivos y muy bien elaborados son dignos de estar en las estanterías de los grandes almacenes de Colombia y el exterior.
¡Bravo por esos quindianos que a pesar de la crisis trabajan diariamente por el bienestar de sus familias y que tienen un talento extraordinario¡