La ganadería en Colombia enfrenta una grave crisis debido al aumento de actividades ilegales como el abigeato, carneo y el sacrificio clandestino, según un reciente informe de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán). Estas prácticas no solo afectan a los productores, sino que también amenazan la sostenibilidad de la industria cárnica del país.
De acuerdo con cifras del gremio, en 2023 las plantas de beneficio legal faenaron 3,1 millones de bovinos, mientras que los mataderos clandestinos procesaron 1,7 millones de animales en condiciones insalubres. Este sacrificio ilegal representa entre el 40% y 45% del total de sacrificios, lo que se ha convertido en una competencia desleal para la industria frigorífica.
José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, calificó esta situación como una “bomba de tiempo” para el sector ganadero. “El abigeato, el carneo y el sacrificio clandestino son prácticas que afectan gravemente a los ganaderos y a toda la cadena cárnica del país”, explicó. En los últimos 14 años, se han registrado 33.650 denuncias por abigeato, lo que equivale a un promedio de seis casos diarios, según la Policía Nacional.
El informe de Fedegán también revela que, mientras en 2013 se sacrificaron legalmente 4,1 millones de bovinos, en 2024 esta cifra se redujo a 3,1 millones. La clandestinidad en el sacrificio ha pasado de 520.000 animales en 2009 a 1,7 millones en 2023, lo que refleja el deterioro de la seguridad rural en el país.
Ante este panorama, Fedegán hace un llamado urgente a las autoridades para fortalecer los controles sanitarios y policiales, mejorar la seguridad rural y establecer un sistema de identificación animal que permita rastrear el ganado y frenar la comercialización ilegal. La competencia desleal que genera el sacrificio clandestino afecta no solo la producción ganadera, sino también la calidad del producto que llega a los consumidores, quienes muchas veces compran carne en condiciones higiénicas precarias.
Por otro lado, el informe advierte que, pese a que el consumo formal de carne de bovino y vísceras en Colombia podría volver a niveles de 18 kilogramos por persona en 2024, la clandestinidad sigue siendo un problema que agrava la situación del sector cárnico.
El sector ganadero espera que el gobierno tome medidas contundentes para enfrentar esta crisis que afecta la estabilidad de miles de productores y la salud pública en el país.