La Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia ha iniciado una investigación formal contra el senador Juan Pablo Gallo Maya, exalcalde de Pereira y actual congresista por el Partido Liberal, por su presunta participación en actos de corrupción relacionados con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Gallo ha sido citado a diligencia de indagatoria por la Corte Suprema debido a presuntos acuerdos ilegales e irregularidades en la aprobación de proyectos y contratos en la UNGRD, entidad encargada de la gestión de riesgos de desastres naturales en Colombia. La citación marca un hito en el proceso judicial, dado que esta fase implica que existen indicios suficientes para que el senador rinda cuentas ante la justicia, lo cual podría tener consecuencias significativas para su carrera política y su imagen pública.
Gallo Maya, nacido en Pereira, Risaralda, es economista de la Universidad Libre y especialista en Marketing y Mercadeo de la Universidad EAFIT. Su carrera ha tenido impacto en el Eje Cafetero, especialmente en Risaralda, donde fue alcalde de Pereira entre 2016 y 2019. En 2022, obtuvo un escaño en el Senado de la República con 10,484 votos obtenidos en el Quindío, lo que lo consolidó como representante de un importante grupo de votantes en el departamento. Sin embargo, a pesar de este respaldo, los quindianos han expresado crecientes inconformidades debido a la aparente ausencia de Gallo en gestiones y proyectos en beneficio de la región, lo que ha generado una sensación de desilusión entre sus votantes, quienes se sienten defraudados por el escaso aporte al desarrollo del territorio.
La Corte basa su investigación en más de cincuenta pruebas documentales y testimoniales que indican que, entre noviembre y diciembre de 2023, la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público (CICP), en la cual participa Gallo Maya, emitió conceptos favorables sobre operaciones de crédito público presentadas por el Ministerio de Hacienda. Dichos conceptos, según las pesquisas, habrían sido emitidos a cambio de beneficios económicos que se concretarían en contratos gestionados por la UNGRD en municipios como Cotorra, Saravena y Carmen de Bolívar.
Frente a estas acusaciones, el senador Gallo ha negado rotundamente cualquier participación en los hechos señalados, defendiendo su postura de inocencia y afirmando no tener relación con funcionarios implicados en la UNGRD. En declaraciones a medios nacionales, aseguró que nunca ha tenido contacto con Sneyder Pinilla, exsubdirector de manejo de desastres de la entidad, y expresó: “Nunca, pero nunca. Es que no me los he encontrado ni en público, ni en las instalaciones que nunca he pisado”. Además, como gesto ante la investigación, Gallo renunció a la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público para no interferir en el proceso.
Este escándalo también involucra a otros congresistas que son investigados por presunta participación en los mismos hechos. Entre ellos figuran Liliana Esther Bitar Castilla, Wadith Alberto Manzur Imbett, Julián Peinado Ramírez, Karen Astrith Manrique Olarte y el excongresista Juan Diego Muñoz Cabrera. Todos ellos han sido citados a diligencias de indagatoria para esclarecer su posible implicación en los actos de corrupción denunciados.
La UNGRD ha estado en el centro de diversas denuncias sobre irregularidades en la adjudicación de contratos y en la gestión de recursos destinados a la atención de desastres naturales. Las investigaciones sugieren que algunos congresistas y funcionarios habrían usado su influencia para obtener beneficios personales mediante contratos, aprovechando sus posiciones en una comisión legislativa estratégica. La Corte Suprema continuará recabando pruebas y desarrollando audiencias para determinar las responsabilidades y establecer sanciones si se confirman los actos de corrupción.
La implicación de Gallo Maya en esta investigación amplifica la frustración de los votantes del Quindío, quienes han esperado ver reflejadas en el Senado las gestiones del congresista en proyectos en beneficio del departamento. La percepción de falta de apoyo al desarrollo del Quindío por parte del senador elegido con votos de la región profundiza las dudas sobre su papel y compromiso, en un momento en el que la transparencia y la gestión efectiva en cargos públicos resultan más que necesarios.