Fue demasiado Pasto para un Quindío que a los 10 minutos ya perdía por 1-0 gracias a un zapatazo de Kevin Rendón, y a los 15 ya sufría el 2-0 a manos de John Jairo Montaño, que cobró un tiro libre que traicionó al arquero Alejandro Otero al desviarse en Iván Velásquez.
Lo bueno para el equipo de ‘Pecoso’ Castro es que la goleada no fue peor, porque bien lo pudo ser: Omar Rodríguez, Víctor Zapata, Edwards Jiménez, Gilberto García, René Rosero… todos trataron de marcar, pero entre las salvadas de Otero y la falta de suerte y puntería impidieron que el tercero llegara.
Sólo al minuto 73 el santandereano Jiménez pudo decretar el 3-0 con un tremendo cabezazo que se estrelló en el vertical derecho para luego ir hasta el fondo.
Pasto, que había caído en su debut con el Medellín en una actuación en la que el equipo sintió el rigor de los 15 días que separaron el arranque del Torneo Finalización de la final frente a Santa Fe, esta vez se vio más suelto y cómodo. Víctor Zapata recuperó su papel de dínamo en la zona de volantes y Omar Rodríguez asumió su rol como conductor/recuperador, pero la salida por derecha, de nuevo, fue decisiva.
Además, Quindío ofreció poca resistencia. La noche pastusa le pasó factura a un equipo que se vio frío todo el partido y que sólo remató tres veces al arco de un José Fernando Cuadrado cómodo.
Ahora Pasto visitará a Junior en la tercera fecha, mientras Quindío buscará su primera victoria del semestre (o al menos su primer gol) el próximo viernes frente a Envigado.