El presidente de Chile reglamentó la reforma constitucional que establece el kínder gratuito. “Estamos corrigiendo una deficiencia e injusticia de la educación”, aseguró El mandatario chileno, Sebastián Piñera, junto con la ministra de Educación, Carolina Schmidt, promulgó este lunes la reforma constitucional que establece el kínder obligatorio y que asegura una educación gratuita para todos los niños a partir de los dos años de edad. De esta manera, la cantidad de años de escolaridad obligatoria en Chile aumenta de 12 a 13, según consigna el sitio web de la Presidencia.
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“Estamos corrigiendo una deficiencia e injusticia de la educación”, aseguró Piñera. “El presupuesto público de educación en estos últimos tres años y medio ha crecido desde 9 mil millones de dólares a 14 mil millones de dólares, siendo, junto al Ministerio de Salud, los dos ministerios con mayor incremento de recursos”, agregó durante una ceremonia en la Escuela República de Costa Rica en Ñuñoa, de acuerdo con el diario El Mostrador.
“Cuando llegamos al Gobierno, la cobertura de la educación preescolar dejaba afuera a los niños más vulnerables de nuestro país. La calidad de la educación escolar estaba estancada y con enormes diferencias entre los niños más favorecidos y los niños más vulnerables. La educación superior era una educación que sólo permitía a unos pocos acceder a ella y, en el fondo, dejaba afuera a muchos niños y jóvenes con talento, por falta de recursos económicos”, subrayó.
Schmidt, por su parte, destacó la promulgación de la reforma sobre la educación: “Esto es tremendamente importante porque las desigualdades de nuestro país nacen desde la cuna y es por eso que debemos poner el foco en la primera infancia. Esta reforma constitucional es fundamental para el desarrollo de Chile, pero sobre todo para construir un país justo y equitativo”.
Por otro lado, la ministra señaló que casi 16 mil niños chilenos no asisten al kínder, el 70% de los cuales pertenece a las familias más vulnerables del país. También indicó que el 87% de los papás que no mandan a sus hijos al jardín de infantes no lo hace porque creen que es innecesario, según el periódico