Toneladas de lodo y rocas arrastradas por una intensa tormenta dejaron atrapados más de una docena de vehículos con más de 40 ocupantes en el kilómetro 25 de la vía que conecta Pasto con el corregimiento de El Encano. Esta carretera, que une la capital de Nariño con Mocoa, en Putumayo, es un destino turístico conocido por sus paisajes y la tradicional bebida hervida. El Encano, apodado la “Pequeña Suiza” y la “Venecia colombiana”, se ha visto gravemente afectado por el desastre.
El deslizamiento, ocurrido el 7 de marzo alrededor de las 3:00 p.m., se ha convertido en una de las tragedias más impactantes de la región en los últimos tiempos. A más de 40 horas del evento, la magnitud de los daños sigue aumentando. El alcalde de Pasto, Nicolás Toro, visiblemente consternado, expresó su incertidumbre sobre la cantidad exacta de víctimas fatales.
El primer balance reporta afectaciones en 65 viviendas, daños en la carretera departamental y en un puente vehicular, así como la pérdida de cultivos de pancoger en la zona rural. El sistema de acueducto de Pasto también resultó comprometido, y al menos 72 familias han sido damnificadas.
Inicialmente, se informó que había cinco desaparecidos, pero las cifras han ido cambiando a medida que avanzan las labores de búsqueda y remoción de escombros en los cuatro deslizamientos que bloquean la vía. Posteriormente, se confirmó que eran cuatro personas desaparecidas, de las cuales ya fueron halladas las hermanas Burbano Montenegro y el conductor de un camión. Aún queda una persona por localizar.
Por el momento, la conexión vial con Putumayo sigue inhabilitada, ya que los deslizamientos han cubierto por completo el camino. Equipos del Instituto Nacional de Vías (Invías), junto con personal de la Alcaldía de Pasto y el Cuerpo de Bomberos Voluntarios, trabajan sin pausa en la zona para restablecer el tránsito y continuar con las labores de rescate.