En Düsseldorf, Alemania, un hombre de 53 años se convirtió en la tercera persona en curarse del VIH luego de recibir un trasplante de células madre.
El hombre fue diagnosticado en 2008 y desde entonces inicio su tratamiento con antirretrovirales, lo que le permitió controlar la infección y reducir la cantidad de virus hasta niveles indetectables en la sangre.
No obstante, pocos años después al “paciente de Düsseldorf”, como es conocido, le fue descubierto leucemia mieloide aguda, razón por la cual fue sometido a un transplante de células madre.
Para esto, los investigadores realizaron una exhaustiva búsqueda para que el donante, además de ser compatible a nivel sanguíneo para evitar el rechazo, contara con una mutación genética resistente al virus, CCR5Δ32.
Ahora, a casi 10 años de su transplante y cuatro años de dejar la medicación de forma supervisada para tratar el VIH, el virus no ha reaparecido en la sangre ni en tejidos y tampoco queda rastro de respuesta del sistema inmunitario a la infección, lo que permite hablar de “curación”.
“Lo que ha hecho es que su sistema inmune ahora mismo sea resistente a la infección por VIH”, explica María Salgado, investigadora IGTP en IrsiCaixa y coautora del estudio a un equipo de TVE en Cataluña.
A este caso se suman otros dos de cura confirmados y relacionados a pacientes que han sufrido leucemia: el paciente de Berlín (Timothy Ray Brown, que falleció por leucemia en 2020) y el paciente de Londres (Adam Castillejo).






