En un pronunciamiento amplio, las estructuras disidentes bajo el mando de alias ‘Iván Mordisco’ instaron al Ejecutivo a retomar el camino del diálogo, afirmando que han reiterado su disposición a una salida negociada al conflicto armado y social del país, pero que, según ellos, el gobierno ha preferido intensificar la confrontación contra las FARC-EP.
Según su versión, el Estado ha difundido información falsa con el propósito de deteriorar su imagen y así legitimar la ofensiva militar, mientras permite la presencia de tropas estadounidenses que, afirman, operan desde trece bases militares —incluidas tres autorizadas durante el actual mandato— ubicadas estratégicamente en el territorio nacional, con el fin de ejecutar un supuesto plan para desestabilizar a Venezuela.
También acusaron al gobierno de utilizar dicha narrativa para intervenir en la región amazónica, con la intención de expandir el accionar paramilitar bajo órdenes de altos mandos castrenses.
Reconocieron que algunas de sus recientes acciones han afectado a la población, algo que lamentan, pero atribuyen al Estado por, según ellos, poner en riesgo a los civiles al usarlos como barrera humana.
Igualmente, lanzaron una serie de advertencias a los ciudadanos sobre posibles consecuencias en medio del recrudecimiento de hostilidades, y plantearon las siguientes recomendaciones:
- Evitar que estaciones militares o de policía se ubiquen cerca de viviendas o lugares públicos concurridos. Si ya están presentes, se sugiere evacuar o exigir su traslado, ya que esto violaría el Derecho Internacional Humanitario.
- No permitir que uniformados hagan uso de vehículos particulares o de servicio público. En caso de ser forzados, se recomienda abandonar el vehículo, entregar las llaves y exigir un comprobante firmado de la entrega.
- Abstenerse de abordar transportes utilizados por el Ejército o la Policía.
- Mantener una distancia mínima de 500 metros entre automóviles civiles y convoyes militares en las vías.
- No colaborar como guías de tropas en zonas rurales.
- No ingresar ni pernoctar en instalaciones militares o policiales.
- En áreas en disputa, los medios de comunicación, entidades humanitarias o vehículos de protección estatal deben circular con señales visibles, a baja velocidad, y contar con permiso previo de las FARC-EP para transitar.
- Evitar permanecer cerca de bases policiales, instalaciones del Ejército o lugares donde haya presencia de fuerza pública.