El Congreso aprobó en su último debate un proyecto de ley que permitirá que el divorcio pueda ser solicitado de manera unilateral en el país.
Esto significa que, tras el proceso de conciliación y la sanción presidencial –en caso de darse–, será posible que una persona legalmente casada solicite la disolución del vínculo matrimonial sin necesidad del consentimiento de su cónyuge.
La iniciativa, que obtuvo 89 votos a favor en la plenaria de la Cámara, busca establecer una regulación que permita a cualquiera de las partes en un matrimonio formal iniciar el proceso de divorcio por decisión propia.
Actualmente, la normativa exige que ambos miembros de la pareja estén de acuerdo para proceder con la separación. En contraste, el nuevo proyecto busca minimizar conflictos que puedan surgir durante este trámite.
El representante Julio César Triana, uno de los autores de la propuesta, afirmó que esta medida es “una herramienta para prevenir la violencia intrafamiliar” y destacó que “si el amor termina y una de las personas ha tomado la decisión, esta debe ser respetada”.