La Plaza Murillo Toro, en el corazón de Ibagué (Tolima), se convirtió este viernes en el epicentro de una nueva jornada de movilización encabezada por el presidente Gustavo Petro, quien congregó a más de 7.000 personas en lo que definió como un acto “por la democracia, la dignidad y el poder constituyente”.
Entre música de bunde, pancartas y aplausos, el mandatario expuso ante sus seguidores la necesidad de avanzar hacia una Asamblea Nacional Constituyente, insistiendo en que la soberanía reside en el pueblo y no en figuras individuales.
“El rey no es soberano, el pueblo es soberano y decidirá”, afirmó Petro, al explicar que la propuesta busca habilitar al pueblo colombiano para impulsar las reformas sociales que no han logrado ser aprobadas por el Congreso.
Según el presidente, el proceso podría concretarse en un plazo de tres meses, pues -dijo- no se trata de redactar una nueva Constitución, sino de activar el poder popular para destrabar iniciativas sociales.
Petro también anunció la creación de un comité promotor encargado de recolectar las firmas necesarias para iniciar el proceso. “¿Ustedes creen que no podemos? Eso solo en las manifestaciones lo hacemos”, expresó ante la multitud, alentando a sus simpatizantes a mantener una participación activa más allá de los comicios tradicionales.
Durante su intervención, el jefe de Estado volvió a referirse al tema de la reelección presidencial, mencionando a los expresidentes Álvaro Uribe Vélez y Juan Manuel Santos.
A Uribe lo señaló de haber promovido una norma para reelegirse, ya Santos de haberla eliminado tras haber sido reelegido por el voto popular en 2014. “Entonces no permitió que ningún presidente se reeligiera”, apuntó Petro.
El mandatario agregó: “Ellos saben que si yo me lanzara a elecciones los barrería de lejos, aquí lo demuestro. Pónganme a los tibios y les gano a todos juntos”, refiriéndose a figuras como Vicky Dávila, Paloma Valencia, Abelardo de la Espriella y Juan Carlos Pinzón, a quienes aludió como posibles precandidatos presidenciales.
Petro insistió en que la actual Constitución de 1991 sigue siendo válida, pero que es necesario permitir que el pueblo colombiano asuma directamente la tarea de aprobar las transformaciones sociales que el Congreso ha bloqueado.
“Lo que necesitamos es que lo que no hizo la nueva Constitución, ni el Congreso, porque se llenó de ‘paracos’ y politiqueros, lo haga el pueblo”, dijo.
El mandatario concluyó su discurso reafirmando que la Constituyente sería el camino para “una verdadera democracia participativa” y para consolidar lo que se llama “el poder constituyente del pueblo colombiano”.