El Quindío cerró el año 2024 con una tasa de desempleo del 12,4%, la más alta entre los departamentos que integran la Región Administrativa y de Planificación – RAP Eje Cafetero. Aunque la cifra representa una disminución frente al 13,7% reportado en 2023, sigue ubicando al departamento en el primer lugar del ranking regional en materia de desocupación.
El balance indica que, a pesar de este panorama, el mercado laboral quindiano tuvo una dinámica positiva con la creación de 29.485 puestos de trabajo, un número considerablemente superior al incremento en la población en edad de trabajar, que fue de 6.661 personas. Este crecimiento fue impulsado por un aumento de 16.974 ocupados, una reducción de 1.098 personas desempleadas y una disminución de 10.314 inactivos.
El desempleo continúa afectando más a las mujeres (12,8%) que a los hombres (12,2%), aunque la brecha de género ha venido disminuyendo desde 2021. Las ramas económicas que más contribuyeron a la creación de empleo en el Quindío fueron actividades artísticas (4.886 empleos), alojamiento y servicios de comida (4.188), administración pública (3.475), comercio (3.445) e industria manufacturera (2.724). Por el contrario, los sectores con mayor pérdida de empleos fueron construcción (-2.073) y servicios profesionales (-730).
Panorama regional
Tolima
En el Tolima, la tasa de desempleo subió del 11,5% en 2023 al 12,0% en 2024. Aunque se generaron 1.580 nuevos empleos, esta cifra no alcanzó a compensar el crecimiento de la población en edad laboral, que fue de 7.379 personas. El desempleo en mujeres alcanzó el 15,2%, superando por 5,2 puntos porcentuales al de los hombres (10,0%). El comercio fue la rama más dinámica con 8.177 nuevos empleos, seguido por actividades artísticas (5.013) y alojamiento y comida (4.245), mientras que la agricultura perdió 12.832 empleos.
Risaralda
Risaralda también reportó un aumento en su tasa de desempleo, que pasó de 8,8% en 2023 a 9,7% en 2024. Se generaron 10.128 nuevos empleos, en línea con el aumento poblacional en edad laboral. La brecha entre hombres (7,7%) y mujeres (12,4%) fue de 4,7%. Los sectores más dinámicos fueron comercio (7.094 empleos), construcción (5.993) y suministro de servicios públicos (2.051), mientras que las actividades profesionales (-4.642) y transporte (-2.959) presentaron pérdidas significativas.
Caldas
Caldas fue el único departamento en reducir su tasa de desempleo, que bajó del 9,8% al 9,4%. Sin embargo, no logró generar suficientes puestos de trabajo, ya que registró una pérdida neta de 4.664 empleos frente a un crecimiento poblacional de 10.905 personas en edad laboral. Aunque los ocupados crecieron en 3.120 y los desocupados se redujeron en 1.818, el número de inactivos aumentó en 9.602. Las mayores contribuciones al empleo provinieron del comercio (3.080), transporte (2.004) y alojamiento y comida (1.612). La construcción, en cambio, perdió 3.447 empleos.
