En la última actualización del recorrido del UARS, el organismo informó que la órbita fue de 90 millas por 95 millas (145 km por 150 km). “El reingreso se espera para las 23:00 del viernes 23 de septiembre y las 03:00 del 24, hora de Nueva York (03:00 – 07:00 GMT)”, señaló.
Durante ese período, el satélite estará pasando por encima de Canadá, África y Australia, así como por amplias zonas de los océanos Pacífico, Atlántico e Índico.
La NASA había informado que el riesgo de daños era “extremadamente pequeño”; sin embargo, el fenómeno genera cierto nerviosismo. La agencia espacial se ocupó de explicar que al encontrarse a una altitud de 115 millas, probablemente alcanzaría la atmósfera a unas 17 mil millas por hora, lo que simularía en cierto punto la caída de una roca que encontraría suficientes obstáculos para ser detenida.
Este es el satélite de la NASA más grande que ha caído en la tierra de manera descontrolada desde el Skylab en 1979.
La media tonelada de chatarra tiene preocupada a la población, pero gracias a una compañía especializada en el desarrollo de software para la seguridad nacional de los Estados Unidos, Analytical Graphics (AGI), se podrá seguir en vivo la trayectoria del satélite.
Cabe recordar que el satélite de Investigación de la Alta Atmósfera (UARS, por sus siglas en inglés) pesa cerca de 6 toneladas y fue puesto en órbita en 1991 por el transbordador Discovery para estudiar la alta atmósfera y realizar mediciones de la capa de ozono.