El Gobierno de Australia presentó este jueves una propuesta legislativa para restringir el acceso a las redes sociales a menores de 16 años, como parte de una medida destinada a mitigar los problemas de salud mental que afectan a niños y adolescentes. El primer ministro, Anthony Albanese, quien ya había anunciado en septiembre pasado su intención de limitar el uso de plataformas digitales entre los jóvenes, reveló que la edad mínima permitida será de 16 años.
“Las redes sociales están perjudicando a nuestros hijos y voy a ponerle fin”, afirmó Albanese durante una rueda de prensa en Canberra. El primer ministro subrayó que esta iniciativa se acordó en el Consejo de Ministros a principios de semana, y aseguró que una vez aprobada la ley, los padres podrán informar a sus hijos que el acceso a las redes “irá contra la ley”.
La normativa, que podría someterse a votación en las próximas semanas, también contempla un periodo de gracia de 12 meses para su implementación tras ser aprobada. Los menores que ya cuenten con cuentas en redes sociales podrán conservarlas, siempre y cuando cuenten con el consentimiento de sus padres.
La ley impondrá a las plataformas digitales la responsabilidad de verificar la edad de sus usuarios y asegurar que los menores de 16 años no puedan registrarse. La Comisión Australiana de Seguridad Electrónica se encargará de definir las pautas para que las redes sociales, como Instagram, TikTok y Facebook, implementen medidas adecuadas de restricción.
Con esta regulación, Australia sigue la estela de otros países que han elevado la edad mínima de acceso a redes sociales. En España, por ejemplo, la edad mínima actualmente es de 14 años, con una propuesta para aumentarla a 16; mientras que en Puerto Rico y Texas, la edad mínima se ha establecido en 18 años para evitar riesgos de privacidad y acoso.