Las remesas enviadas por colombianos en el exterior continúan siendo una fuente clave de ingresos para la economía nacional, y en 2024 registraron un crecimiento significativo en el Eje Cafetero y Tolima, con Quindío aumentando en un 18,8%, Caldas con el mayor incremento del 25,1%, Risaralda con 17,9% y Tolima con 8,1%.
En términos absolutos, Quindío pasó de recibir 221,2 millones de dólares en 2023 a 262,9 millones en 2024, consolidando su dependencia de estos recursos para dinamizar la economía local. Caldas fue el departamento con mayor crecimiento en la región, pasando de 199,4 millones de dólares en 2023 a 249,5 millones en 2024.
A nivel nacional, las remesas representan la segunda mayor fuente de divisas después del petróleo, alcanzando el 2,8% del PIB, un crecimiento considerable comparado con el 1,1% que representaban hace una década. Este flujo de dinero es determinante para miles de familias en el Eje Cafetero, quienes dependen de estos recursos para consumo, inversión y educación.
El crecimiento de las remesas evidencia una vez más, la importancia de los migrantes en la economía regional y plantea la necesidad de fomentar estrategias que permitan aprovechar estos recursos en proyectos productivos que impulsen el desarrollo de los departamentos receptores.