El Departamento Administrativo de Planeación Municipal de Armenia informó que la tala de 11 palmas yuca en el barrio Granada se realizó con base en criterios técnicos y bajo el cumplimiento de la normativa ambiental vigente, descartando que se haya cometido alguna infracción.
Según explicó Soraya María Velásquez, líder de Planificación Ambiental de la Alcaldía de Armenia, la medida fue adoptada tras una evaluación que determinaron el deterioro físico y fitosanitario de las especies, lo que comprometía su estabilidad y representaba un riesgo para la comunidad.
“Las palmas tenían fracturas y fisuras en el tallo y estaban sembradas en espacios muy reducidos, lo que afectaba su crecimiento y representaba un riesgo de caída posible”, precisó la funcionaria.
Velásquez aclaró que, debido a la naturaleza de las especies, la intervención no requería socialización pública, ya que las palmas yuca no son árboles nativos ni especies protegidas. Al tratarse de ejemplares ornamentales, su manejo, traslado o tala no exige permisos especiales ni procesos formales ante las autoridades ambientales.
“Estas especies pueden ser intervenidas sin que ello implique una infracción ambiental o falta de comunicación institucional”, agregó el líder de Planificación Ambiental.
La funcionaria también descartó afectaciones a la fauna urbana, señalando que Armenia cuenta con múltiples zonas verdes y corredores ecológicos que garantizan refugio y movilidad para aves e insectos.
Finalmente, Velásquez invitó a la ciudadanía a mantener una comunicación directa con las entidades competentes, como el Departamento de Planeación Municipal y la Corporación Autónoma Regional del Quindío (CRQ), para aclarar dudas y evitar la propagación de desinformaciones en torno a las intervenciones ambientales que se realizan en la ciudad.