El alcalde de Calarcá, Juan Sebastián Ramos, reafirmó su posición frente a la realización de cabalgatas en el municipio. Aunque aclaró que, como persona y como mandatario, no está de acuerdo con este tipo de eventos, expresó su respeto por quienes participan de ellos, reconociendo que la mayoría de caballistas cuidan adecuadamente a sus animales y los exhiben como muestra de la belleza de los equinos.
Sin embargo, el mandatario advirtió que siempre existe un “parche negro”, personas que se exceden en el consumo de licor y generan desórdenes, lo cual, según dijo, empaña el propósito de estas actividades y alimenta las críticas en su contra.
Ramos aseguró que la administración municipal estará vigilante para garantizar el bienestar de los animales y el cumplimiento de las normas: “Quien incumpla lo establecido en temas de maltrato, o colocar bafles a los caballos como ocurría antes, será sancionado. Desde temprano, estaremos con veterinarios de la Alcaldía verificando que cada equino sea de propiedad de los participantes y que se encuentre en óptimas condiciones para salir”.
Como parte de las actividades alternativas, el alcalde anunció una iniciativa que calificó como “una noticia más bonita”: la realización de la cabalgata de caballitos de palo. Para este evento infantil, se espera la participación de más de 3.000 niños recorriendo las calles de Calarcá junto a sus familias, promoviendo una celebración sana, recreativa y sin afectación a los animales.
“Queremos ver las calles llenas de niños felices, acompañados de sus familias, disfrutando de esta actividad pensada para ellos”, destacó el mandatario.