A plena luz del día y frente a la mirada de su hija menor, Januaris Rodríguez Julio, de 35 años, fue asesinada con arma blanca en una calle a pocos metros del hospital municipal de San Onofre, Sucre. Testigos relataron que el agresor, identificado como su expareja sentimental, la persiguió hasta alcanzarla, la atacó y luego huyó del lugar dejando el cuerpo junto a la vía.
Minutos después, según fuentes locales, el mismo hombre regresó a su vivienda y se causó heridas con un arma blanca en un intento por quitarse la vida. La rápida reacción de vecinos y de la policía impidió el suicidio; efectivos lograron capturarlo y trasladarlo bajo custodia al centro asistencial del municipio, donde permanece bajo vigilancia de las autoridades.
Personas que presenciaron los hechos afirmaron que la escena quedó marcada por el pánico: “la degolló y huyó del lugar, dejando el cuerpo de la víctima tendido cerca del hospital”, dijo un testigo. Otra versión señala que la agresión habría ocurrido tras la finalización de la relación sentimental entre ambos.
Afuera del hospital, vecinos se congregaron para exigir justicia y mayor protección para las mujeres. “No puede quedar libre, que pague por lo que hizo”, gritaban ciudadanos entre manifestaciones de dolor e indignación.
Las autoridades adelantan las diligencias de investigación para establecer las causas reales del ataque, la cadena de custodia de pruebas y las posibles responsabilidades penales.





