La Procuraduría General de la Nación le abrió un proceso de investigación disciplinaria a Sandra Paola Hurtado Palacio, gobernadora del Quindío, por presuntamente presionar a sus trabajadores para apoyar la reelección de Juan Manuel Santos.
Esta investigación se da luego de una denuncia hecha por el Centro Democrático, donde señala que la gobernadora compró votos y amenazó con destituir de sus trabajos a algunos de sus empleados sino apoyaban al Presidente.
El Ministerio Público investigará si la gobernadora usó presupuesto departamental para contratar a gente que debía entregar un listado con mínimo 20 personas que apoyarían a Santos.
“La denuncia indica que algunos de estos contratistas fueron obligados a ir puerta a puerta recogiendo datos como números de cédula y puestos de votación de las personas que visitaron, otros debieron a llamar a casas haciéndose pasar por una firma encuestadora preguntando la intención de voto”, señala el documento.