Una emboscada contra un vehículo del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) en la vía Panamericana, a la altura del municipio de Caldono, Cauca, resultó en la muerte de cuatro personas y dejó varias más heridas. Entre los fallecidos se encuentra Manuel Octavio Bermúdez, el violador y asesino serial conocido como “El Monstruo de los Cañaduzales”.
El ataque ocurrió el 17 de octubre cuando el vehículo oficial que transportaba reclusos fue interceptado por un grupo armado ilegal. Dos funcionarios del Inpec, identificados como el inspector Óscar Darío Bravo Pasuy y el dragoneante Michel Carlosama Pechene, murieron en el lugar. Bermúdez, capturado en 2003 y condenado por violar y asesinar a al menos 21 niños, falleció horas después en un hospital.
El método del criminal era acercarse a menores de escasos recursos que buscaban trabajo y este hombre, con engaños, les ofrecía dinero para realizar labores campesinas. Sin embargo, luego abusaba de ellos y los asesinaba.
Uno de los casos más recordados es el de Andrés Felipe Serna, un niño de 12 años, quien un día de marzo de 1999 salió de su casa en Palmira, Valle del Cauca, hacia el trabajo de su pader y nunca llegó ni regresó a su hogar.
“Cuando yo llegué como a las 6 de la tarde le pregunté al papá si estaba con él. Me dijo que no, que no había llegado”, contó la madre.
Luego de la búsqueda, la mamá del menor reconoció el cuerpo de su hijo por la ropa que llevaba puesta aquel día en el que nunca regresó.
“Yo al peladito le dije ‘si querés trabajar conmigo, yo te doy $15 mil pesos’. Entonces, él me dijo ‘¿en qué?’. Le dije: ‘cogiendo espigas de caña’”, contó Bermúdez.
La ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, lamentó el atentado, que también dejó a otros tres funcionarios del Inpec heridos. Las autoridades sospechan que el ataque fue perpetrado por miembros del frente Dagoberto Ramos de las disidencias de las FARC.
