Un trágico incidente marcó el inicio de 2025 en la zona rural del Guamo, Tolima. Un niño de 13 años, residente en Chicoral, sufrió quemaduras severas tras manipular una mecha de pólvora que encontró mientras jugaba en la mañana del 1 de enero.
El menor, quien había viajado con sus abuelos para celebrar las festividades, recogió la mecha del suelo, la cual se activó de forma repentina y estalló en sus manos. Como resultado, sufrió graves lesiones en tres dedos de su mano izquierda, afectando las falanges proximal y distal del primer dedo, así como las falanges media y distal del segundo y tercer dedo. Además, presentó quemaduras en el mentón, cuello, tórax y abdomen.
Inicialmente, el menor fue atendido en Chicoral, pero debido a la gravedad de las heridas, fue remitido a la Unidad de Quemados del Hospital Federico Lleras Acosta en Ibagué durante la madrugada del 3 de enero. Allí, el equipo médico realizó radiografías para descartar fracturas óseas y procedió con una cirugía para tratar las quemaduras en los dedos y las demás áreas afectadas. Actualmente, permanece bajo observación médica.
Martha Palacios, gerente del hospital, aprovechó para hacer un llamado a la prevención:
“Queremos invitar a los adultos a que centren la atención en el cuidado de los niños, a que desde casa reforcemos que la pólvora no es un juego y que ninguna persona debe celebrar ni manipular este tipo de artefactos, que en un segundo pueden salirse de control y llegar a ocasionar lesiones que pueden ser determinantes para toda nuestra vida.”
Este caso se suma a las preocupaciones por el uso inadecuado de pólvora durante las celebraciones de fin de año, reiterando la necesidad de promover campañas de sensibilización para evitar tragedias como esta.