Se informó que los síntomas más comunes para descubrir la enfermedad son fiebre, tos, estornudo y secreciones en los animales. Se recordó que los propietarios de los predios con equinos están en la obligación perentoria de avisar inmediatamente al ICA sobre la presencia de estos síntomas, o a las Umatas en los municipios, para asumir los controles suficientes y la aplicación de los medicamentos veterinarios adecuados.
Se recomendó no movilizar de los establos y pesebreras ningún animal durante el tiempo de la cuarentena, como medida para controlar la enfermedad. Igualmente se advirtió que esta enfermedad no se transmite a los seres humanos
También se ordenó establecer medidas de limpieza y desinfección de instalaciones y pesebreras, como de herramientas, vestimenta y zapatos de trabajadores en cada sitio de labor donde haya equinos y de vehículos que ingresen a los establos.
En desarrollo de la reunión de la Mesa Pecuaria Departamental se dejó claro que la responsabilidad del control de la enfermedad se concentra en el propietario del predio donde se hallan los animales, con el buen manejo, cuidado y tratamiento del brote, con la asesoría del ICA.
Finalmente, se acordó hacer un monitoreo permanente de la enfermedad, para lo cual se harán nuevas convocatorias a la Mesa Pecuaria Departamental, a instancias de la Secretaría de Agricultura y Medio Ambiente del Departamento del Quindío.