Construir un centro de reclusión transitorio para albergar hasta dos mil sindicados, es uno de los propósitos de las entidades territoriales
La sobrepoblación en las estaciones de policía y en las Unidades de Reacción Inmediata de las fiscalías es una realidad de índole nacional que no está exenta en el Quindío. En los 13 centros de reclusión transitorios que tiene el departamento, se sobre pasa el 51% de la población.
De acuerdo al comandante de la Policía Quindío, Coronel José Luis Ramírez Hinestroza, cada centro de reclusión transitorio tiene una capacidad máxima de 10 personas en proceso de judicialización, sin embargo, debido al aumento de sindicados han tenido que doblar hasta cinco veces su espacio.
Las entidades territoriales, quienes son responsables de velar por la integridad de los sindicados han estado sosteniendo conversaciones con el Ministerio de Justicia y el IMPEC para encaminar proyectos orientados a la creación de centros de reclusión más grandes.
La Gobernación del Quindío a través de la Secretaría del Interior ya está en la búsqueda de un lote de diez hectáreas para llevar a cabo la construcción de un centro de reclusión transitorio para albergar hasta dos mil personas en proceso de judicialización del Eje Cafetero. Un trabajo que podría llevar bastante tiempo en trazabilidad, diseños, consecución de recursos y ejecución del mismo.
A corto plazo, desde la secretaría del Interior en apoyo con la Procuraduría departamental se está en la búsqueda de una propiedad que haya entrado en proceso de extinción de dominio para adecuar un centro de reclusión temporal en donde se pueda albergar la mitad de esta población que excede las instalaciones de la Policía y la Fiscalía. Otra tarea de alta complejidad teniendo en cuenta las condiciones de seguridad que debe tener el lugar para poder acoger a personas con señalamientos delictivos.
