El Gobierno Nacional ha intensificado su presencia y acciones en el departamento del Cauca, luego de una serie de atentados perpetrados por disidencias de las FARC durante el mes de abril de 2025. Estos ataques, que han dejado víctimas fatales y heridos, han causado gran preocupación entre la población civil y las autoridades, generando un clima de inseguridad en la región.
En respuesta a la creciente violencia, el presidente Gustavo Petro ordenó la creación de un consejo de seguridad permanente en el Cauca, con el fin de coordinar esfuerzos entre las fuerzas militares y garantizar la seguridad de los ciudadanos. Esta decisión se toma luego de que varios municipios del Cauca, como Mondomo, Morales y Piendamó, fueran blanco de explosiones y otros actos violentos perpetrados por grupos disidentes de las FARC, que operan bajo el liderazgo de alias Iván Mordisco.
Uno de los atentados más recientes tuvo lugar en Mondomo, donde un vehículo cargado con explosivos estalló cerca de una subestación de policía, dejando a una mujer muerta y a varias personas heridas. Además, otras explosiones en diferentes puntos del Cauca, como Santander de Quilichao, también causaron víctimas y sembraron el pánico en la población.
El ministro de Defensa, Pedro Sánchez, hizo un llamado a la colaboración ciudadana, ofreciendo una recompensa de hasta 300 millones de pesos a quienes puedan aportar información clave para la captura de los responsables de estos actos terroristas. Sánchez señaló que los grupos disidentes continúan vinculados al narcotráfico y al terrorismo, y que el Gobierno no tolerará más ataques contra la población civil ni contra la Fuerza Pública.
Asimismo, el Gobierno decidió suspender el cese al fuego bilateral con las disidencias de las FARC, luego de que este acuerdo no fuera renovado tras su vencimiento el 15 de abril de 2025. Sin embargo, el presidente Petro ratificó el compromiso con los diálogos de paz y aseguró que los esfuerzos por alcanzar la paz total en Colombia seguirán adelante, a pesar de los desafíos presentados por estos grupos armados ilegales.
Reacciones de líderes sociales y organizaciones internacionales
Líderes sociales y organizaciones internacionales han expresado su preocupación por la escalada de violencia en el Cauca. La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos condenó los recientes atentados y llamó a respetar los derechos fundamentales de la población. El organismo alertó sobre el riesgo de una escalada del conflicto armado en varias regiones del país y exhortó tanto al Estado como a los grupos armados ilegales a mantener abiertos los canales de diálogo como vía para alcanzar una paz sostenible.
Por su parte, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) ha señalado que la situación humanitaria en Colombia ha alcanzado niveles críticos, siendo el Cauca una de las regiones más afectadas. El CICR instó a proteger a la población civil y a respetar las normas del Derecho Internacional Humanitario.
Líderes sociales en el Cauca han denunciado amenazas y ataques, y han pedido al Gobierno Nacional que garantice su seguridad y la de las comunidades que representan. Organizaciones defensoras de derechos humanos han reiterado la necesidad de implementar medidas efectivas para proteger a estos líderes y prevenir nuevas agresiones.
La situación en el Cauca continúa siendo delicada, y el Gobierno Nacional se compromete a reforzar las medidas de seguridad en la región para contrarrestar la violencia y proteger a la población civil.
