La muerte de Celeste Barbosa, una bebé de 14 meses, ha encendido las alarmas en Valledupar sobre los riesgos de la automedicación y la administración de medicamentos sin supervisión médica.
De acuerdo con lo conocido y expuesto en el programa Séptimo Día, el 17 de noviembre de 2024, sus padres, Adriana Julio y Luis Barbosa, decidieron llevarla a la droguería Malecón No. 2 debido a síntomas de gripa. Allí, una trabajadora identificada como Patricia Gómez les recomendó una inyección, asegurando que ayudaría a aliviar la congestión nasal de la pequeña.
Sin embargo, minutos después de la aplicación, la niña quedó inmóvil. En un principio, su madre creyó que se había relajado, pero su padre notó que su piel había tomado un tono morado y no respondía. De inmediato, la trasladaron al Hospital Nevada, pero lamentablemente, Celeste llegó sin signos vitales.
El caso generó fuerte indignación y preocupación en la comunidad, al evidenciar los peligros de recibir medicamentos sin prescripción médica. Autoridades sanitarias indicaron una vez más, que es importante acudir a profesionales de la salud y evitar la automedicación, especialmente en niños pequeños, ya que puede tener consecuencias fatales.
La tragedia de Celeste no es un caso aislado. Testimonios recopilados por Séptimo Día revelan que otras familias han enfrentado situaciones similares al optar por tratamientos recomendados en droguerías, sin conocimiento médico adecuado.
Las autoridades adelantan investigaciones para esclarecer lo sucedido y determinar posibles responsabilidades en este lamentable hecho.